Temprana y corta es la carrera del futbolista profesional, atravesada por distintos periplos, la mayoría inimaginables para cualquier joven, más no para Braian Noriega. Comenzó a jugar al fútbol en el equipo Jorge Newbery de Río Ceballos y apenas tenía ocho años cuando un amigo de su padre lo llevó a probar suerte a Talleres de Córdoba, lugar en el cual todavía practica lo que a sus ocho años era un divertimento y ahora es su profesión.
“A los 14 años se puede decir que decidí definitivamente que iba a dedicarme a esto. En ese momento ya algunos entrenadores decían que tenía las condiciones como para hacerlo, y por suerte conté con el apoyo de mis padres”, expresó Noriega. Y es que los tiempos de cualquier adolescente no corren a la hora del fútbol, en un ambiente donde las decisiones importantes llegan mucho antes de la madurez.

Lejos de las luces del estadio, y la posibilidad de vivir de lo que muchos quisieran, está el esfuerzo de chicos que dejan sus horas libres con amigos para dedicarse a la dura contienda que implica un lugar en las inferiores. Al respecto Noriega agrega: “Un chico se puede enfrentar a muchas situaciones muy difíciles cuando apenas llega a un club competitivo. Hay muchas cosas que tenés que aguantar y son esas mismas, las que te van dando la madurez necesaria”.
El nacido en Río Ceballos es un atacante nato, durante mucho tiempo se desempeñó como enganche, una posición muy valorada pero en plena extinción en nuestro fútbol. Con el paso del tiempo los entrenadores lo adelantaron en la cancha para convertirlo en un “9” de área, aunque él mismo se define no como un centrodelantero posicional, sino como un definidor, que se mueve por todo el frente de ataque.

En su búsqueda por mejorar, Noriega observa a los delanteros que triunfan en el fútbol local, tratando de sacar de cada uno las mejores virtudes, aunque aclara que sus máximas referencias se encuentran en el fútbol europeo, con centroatacantes de la talla de Robert Lewandowski, o el reconocido Luis Suarez.
El delantero de Talleres se define como un jugador con buena lectura del juego, algo que forma parte de su ADN luego de haber jugado como armador. A esas dotes de conductor de juego Noriega le suma una interesante capacidad atlética, necesaria para su puesto actual, ya que en el mismo debe estar es constante lucha con los defensores rivales.
“Antes jugaba con toda la cancha de frente, luego me adapté a jugar de espaldas al arco, a moverme como 9, pero siempre en contacto con la pelota, y todavía me falta mejorar mi juego aéreo. Me quedo después del entrenamiento, muchas veces, con un arquero y un par de pelotas practicando”, explica Noriega.
Objetivo: Primera.
Hace ya dos años, Brian Noriega tuvo la oportunidad de integrar el plantel de primera división en Talleres, con apenas 16 años, llegando a ser reserva en el banco en partidos que en ese momento eran del Torneo Argentino A, además de la Copa Argentina, certamen en el cual compiten los mejores equipos del país.
En relación a esto, el delantero manifestó: “Pude compartir entrenamientos y vestuarios con Gonzalo Klusener, uno de mis referentes como atacante, además de Juan Sánchez Sotelo, Javier Villareal, jugadores de gran trayectoria en primera división. Fue una experiencia muy linda porque aparte de jugadores de fútbol son grandes personas, que buscan ayudarte, aconsejarte”.
A partir de allí algunas lesiones, sumado a errores lógicos de sus 16 años y su inexperiencia lo alejaron de la primera de su equipo en lo que fue para Brian “un momento difícil”. De las malas también se construyen los profesionales y Noriega hoy es una de las figuras de su división en AFA, habiendo marcado goles en partidos determinantes y ante todos los denominados grandes del fútbol nacional.
Su actualidad lo vuelve a perfilar como uno de los goleadores a tener en cuenta en un Talleres que se encuentra a un paso de ascender a la B Nacional. Allí la base de jugadores será más amplia y Noriega sueña con ser parte del primer equipo. “Para el próximo torneo, espero poder hacer la pretemporada en primera, agarrar ritmo y poder integrar el plantel definitivamente. Sino en tercera que es un buen nivel también”, afirmó.
Otro de los grandes logros en la joven carrera de Brian Noriega fue haber sido preseleccionado para formar parte de los juveniles en la selección de AFA, junto con otros grandes talentos que hoy brillan en algunos de los cuadros más importantes.
Con respecto a la eliminación en primera ronda del combinado juvenil argentino en el último mundial, Noriega explica que si bien Argentina se mantiene como potencia internacional, el nivel de muchos otros seleccionados ha crecido y la competencia se vuelve cada vez más dura.
El camino a futuro del nacido en Río Ceballos tiene como sueño jugar con Talleres en la primera división de la AFA y devolver al club, del cual es hincha, al lugar que le pertenece en el fútbol nacional. “Es algo que deseo cumplir, poder jugar en primera división y en Talleres. Este es el club que me formó y del cual soy hincha, estoy acá desde los 8 años”, sostuvo orgulloso Noriega.