El domingo pasado, junto con las elecciones municipales, se llevó a cabo un referéndum para decidir la aprobación o desaprobación de las ordenanzas 07/2015 y 08/2015 que modifican el régimen de farmacias. La polémica se había suscitado a partir de la instalación de una farmacia sindical de AGEC. Finalmente, triunfó el “no”.
Por Lucía Argüello.
La elección de las autoridades municipales no fue la única decisión política que debieron tomar los ciudadanos de Villa Allende el pasado domingo 26 de julio. Tras la polémica suscitada por la instalación de la farmacia de AGEC y la inédita convocatoria a referéndum solicitada por el intendente Héctor Colombo, finalmente el no a las ordenanzas 07/2015 y 08/2015 se impuso en las urnas.
El conflicto había comenzado en diciembre del año pasado cuando la Asociación Gremial de Empleados de Comercio (AGEC) inició la construcción de un policonsultorio y una farmacia en 9 de julio 235 a 150 metros de otras dos farmacias anteriores, cuando las ordenanzas vigentes (13/2005 y 36/2012) establecían una distancia mínima de 300 metros. Ante la pugna entre los farmacéuticos locales y los 3000 afiliados de Obra Social de los Empleados de Comercio (OSECAC), el concejal Fabián Uema, que a su vez es miembro de la comisión directiva de AGEC, presentó dos ordenanzas para eximir a las farmacias sindicales de esta condición, argumentando que atienden sólo al padrón de afiliados.
Dichas ordenanzas fueron aprobadas por el Concejo Deliberante el 5 de mayo de este año pero vetadas luego por el Ejecutivo. El proyecto fue tratado y aprobado nuevamente por el Concejo, ante lo cual el intendente Héctor Colombo hizo uso de su facultad de promover un referéndum. Finalmente triunfó el “no” con un 27% frente a un 20% del “sí”, por lo que las ordenanzas 07/2015 y 08/2015 no serán implementadas.
Sin embargo, la proporción de votos anulados y en blanco fue superior al 50% y muchos vecinos reconocieron que faltó información sobre el tema. Más de uno se sorprendió al enterarse de la existencia del referéndum y los carteles oficiales que había en los establecimientos se limitaban a cuestiones procedimentales.
“Yo decidí no poner nada porque no me informé bien acerca de las ordenanzas pero fundamentalmente porque no sabía a quién beneficiaba con mi voto, porque siempre hay alguien que sale beneficiado. Al no estar bien informada, no pude formarme una postura clara”, señaló Victoria tras votar en el Colegio Vergonjeanne.
“Creo que la gente priorizaba las elecciones municipales y no sabía muy bien de qué trataba el referéndum, hubiera sido bueno tener más tiempo”, señaló por su parte el actual presidente del Concejo Deliberante, Livio Montrasi, y añadió que muchos aspectos del asunto fueron malinterpretados.
Por el momento continuará la vigencia de las ordenanzas 13/2005 y 36/2012 a las cuales tendrá que adecuarse la farmacia de AGEC. Aunque estas regulaciones no contienen referencias específicas a las farmacias sindicales, no impiden su instalación siempre y cuando respeten la distancia mínima de 300 metros con respecto a las farmacias ya establecidas, entre otras cuestiones.
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