El presidente Alberto Fernández anunció en la noche del viernes 21 de agosto, la decisión de declarar como “servicios públicos a la telefonía celular y fija, Internet y la televisión paga” y anticipó que las tarifas de esas prestaciones quedarán congeladas hasta el próximo 31 de diciembre de 2020.
Dicha medida se concretará a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que se dará conocer en las próximas horas, a partir del cual se dejarán sin efecto los aumentos de los abonos anunciados por algunas de las empresas prestadoras a partir del 1 de septiembre.
Finalmente, vale aclarar que el anuncio también deja sin efecto el incremento de entre 10 y 15 por ciento que las tres mayores operadoras de telefonía celular –Movistar, Telecom Personal y Claro– tenían previsto aplicar a partir del primer día de septiembre.