Colaboración: Candela Muntaner
6to Año, Instituto Milenio Villa Allende
Durante la mañana del martes 16 de junio, el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, volvió a referirse al posible regreso a clases para el segundo semestre en el país.
Sus declaraciones se dieron en el marco de una entrevista para la radio Futuröck FM, donde aseguró que los requisitos que actualmente se están barajando para permitir la vuelta al ciclo lectivo 2020 son: “bajo nivel de circulación, protocolos, escuelas listas y consensos”.
En ese sentido, mencionó que por el momento ve “imposible” el inicio para el Área Metropolitana de Buenos Aires, pero sí para las provincias que estén atravesando la Fase 5 del plan trazado para combatir la pandemia, como son los casos de Catamarca, San Juan y Jujuy.
Sobre esta última provincia, también criticó la decisión del COE jujeño de adelantar el retorno lectivo para esta semana. Sucede que la complicada situación de Villazón, ciudad limítrofe de Bolivia con respecto a la COVID-19 y la pronta llegada de las bajas temperaturas por el cambio de estación, preocupan al ministro.
“Creemos que es algo que no corresponde, no están dadas las circunstancias y mucho más después de los hechos de las últimas horas en La Quiaca y el inicio del invierno. Hay una carta firmada por los docentes y las familias pidiendo que se revea la medida y esto ya lo he hablado con el gobernador”, dijo Trotta, esta vez a Télam.
No obstante, desde el gobierno jujeño manifestaron que era la mejor opción para facilitar el derecho a la educación de estudiantes de zonas donde no se podía garantizar el acceso a Internet.
El ministro también manifestó que va a ser una escuela “distinta a la de marzo“, en la que posiblemente se escalone la concurrencia y se dé prioridad a los cursos superiores.
Lo anterior, un pensamiento similar al que se venía pensando desde el COE Central cordobés, en cuanto a la posibilidad de regresar a las clases en el próximo mes de agosto.
La mirada docente

“El regreso a clases implica un gran desafío y responsabilidad tanto para directivos como docentes. Planificar, ajustar y acomodar todo lo que sea necesario para seguir brindando un espacio de aprendizaje bajo los protocolos establecidos”, opinó Helena Conrero, docente del Instituto Milenio de Villa Allende, ante la consulta de este medio.
“El contacto personal hace mucha falta para poder despejar dudas y seguir afianzando aprendizajes pero habrá primero que organizar tiempos y espacios para que se haga de la mejor manera posible y en un marco de seguridad”, sostuvo la profesional.