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Finalizaciones de ciclo lectivo 2015. Entre alegría y esfuerzos

Cada ciclo lectivo se presenta con diversas realidades acordes a los diferentes niveles educativos, diversidad de alumnos y acompañamiento educativo y familiar.

  • Por Natalia Boffelli
  • Lic. en Psicopedagogía MP13-1567

Cada ciclo lectivo se presenta con diversas realidades acordes a los diferentes niveles educativos, diversidad de alumnos y acompañamiento educativo y familiar.

Tenemos los peques de sala de cinco, que concluyen una hermosa etapa de aprendizajes y de espacios lúdicos con intención pedagógica, preparados para salir de entornos pequeños a espacios más amplios y con cantidad de alumnos que superaran sus expectativas al año entrante; felicitarlos, estar presentes en los eventos o entregas de informes y compartir con ellos como familia es muy importante para que se preparen a la nueva etapa con contención y concientizando a través de su informes y carpetas todo lo realizado.

La contención emocional de las familias es muy importante en este traspaso no solo educativa y física, sino afectiva pues deberán también afrontar los cambios docentes, despidiendo su docente que tanto contacto y conocimiento tiene de cada alumno en su desempeño de aprendizaje y conductual y su entorno familiar. Hacer sentir a estos niños una etapa cumplida y las felicitaciones de las labores realizadas es importantísimo para acompañar las expectativas hacia una nueva etapa por vivir, que tendrá sus diferencias pero con puentes creados por docentes y padres.

En nivel primario se transforman en dos cuestiones, alumnos que se egresan y viven sus viajes y sus emociones a flor de piel, preadolescentes, en pleno cambio corporal, conductual y de pensamiento que hay que acompañar disfrutando y hablando sobre esta nueva etapa que comenzara, haciendo un recorrido hablado de todo lo vivido y los logros obtenidos, aprendizajes compartidos, mantenimiento de amistades que se fortalecen con las pandillas que se crean acorde a cuestiones que se tienen en común.

Algunos de ellos vivenciarán exámenes, los cuales deben ser acompañados por docentes y familias, preparándolos no solo en lo que respecta al estudio y aprendizaje sino también en hacerles saber que pueden lograrlo, que se confía en su posibilidad y que reforzar sus aprendizajes los preparan para nuevos grados y niveles con más fortaleza.

Estar a su lado desde el acompañamiento incondicional y reforzando lo positivo es lo ideal para que su autoestima se fortalezca y viabilice su postura hacia el aprendizaje. Ya no es momento de reproches ni de retos, sino de ayuda, acompañamiento y refuerzo de su personalidad para afrontar estas etapas. Lo importante es no recargar con miedos y apremios ante los exámenes sino de generar espacios de ayuda y diálogo para que sea logrado.

Hay alumnos que llegan a estas instancias con gran esfuerzo y compañía y otros sin nada de ello, pero para ambos el compromiso de padres es fundamental y preguntar a sus docentes en que hacen hincapié, que es lo más importante a tener en cuenta y donde están las dificultades de su hijo/a, para ayudar con mayor firmeza y atención a las dificultades manifiestas durante el año.

Los adolescentes, al igual que lo expuesto como padres tenemos la responsabilidad de acompañarlos, de imponer la necesidad de culminar la educación secundaria, de acompañar y entender la etapa que transitan pero con firmeza de ideas claras de padres que orienten y brinden los recursos para que salgan adelante, fortalecerlos desde lo emocional, hacer seguimientos personalizados si lo requieren, hay alumnos más maduros o hábiles que otros y hay casos donde todavía requieren el sostén presente y diario de la familia. Enfrentar los exámenes con preparación, hablando con los profesores, tener carpetas y programas de estudios y anexos necesarios, para enfrentar en diciembre y febrero, el logro de aprendizajes sólidos.

Y qué decir de aquellos que ya aprueban todas las materias o áreas y se enfrentan ya a sus elecciones y decisiones vocacionales,… acompañarlos y dialogar sobre sus miedos, estados anímicos así como logros y dificultades que se presentan, disfrutar con ellos esta etapa con mucho amor y firmeza para darles fuerzas para seguir día a día… si hay tropiezos, evaluar dificultades junto con ellos y hacerles comprender que son elecciones de vida… que serán profesionales en cortos tiempos si se lo proponen y podrán trabajar de lo que tanto anhelan.