- Colaboración: Renata Pagnucco y Pedro González (4to IENM). Pedro Camussi e Ignacio Biglia (4to IMVA).
A mediados de octubre se llevó a cabo el primer campamento de reapertura en el histórico predio Villa Leonor. El evento fue posible ya que, en febrero de este año, el Ministerio de Desarrollo Social de Córdoba celebró un contrato de comodato con la Universidad Provincial de Córdoba (UPC), a fin de ceder el uso y goce del espacio natural para sus actividades académicas, en este momento encaradas por la Facultad de Educación Física (IPEF).
Así, en esta primera oportunidad, estudiantes de tercer año del profesorado de Educación Física, acompañados por el profesor Mario Acebal, asistieron al campamento ubicado en el paraje Los Quebrachitos de Unquillo, en una experiencia que todos valoraron como súper enriquecedora. Desde la UPC sostienen que este espacio, sin dudas, se convertirá en uno de los sitios naturales más importantes para el desarrollo de actividades de todos sus futuros profesionales.
“Fue un acontecimiento muy apreciado por nuestros profesores y estudiantes, por las características que el predio brinda a nuestra formación: el acceso al río, el resguardar las características naturales del medio ambiente y además disponer de una población cercana, que nos puede asistir ante cualquier urgencia”, resaltó a El Milenio Carola Tejeda, decana de la Facultad de Educación Física.
El acontecimiento también marcó el regreso de un sueño con más de 70 años de historia: el del afamado artista italiano Guido Buffo de convertir ese espacio natural en un idílico centro para la formación artística, cultural, científica y educativa de los jóvenes.


Un deseo para la juventud
En 1951, Guido Buffo donó toda su propiedad en Unquillo al Estado Nacional. Se trataba de unas 50 hectáreas, ubicadas principalmente en lo que hoy es la Reserva Hídrica Recreativa Natural y Municipal Los Quebrachitos.
Según sus propias palabras, tal desinteresado gesto fue en memoria de los grandes amores de su vida: su esposa Leonor y su hija Eleonora. Como el mismo Buffo aclararía en diversas ocasiones, el objetivo era que esas tierras se preserven para “el desarrollo de actividades culturales, científicas, artísticas e intelectuales propias de la juventud”.
Durante la primera década y hasta su fallecimiento en 1960, el pintor italiano pudo apreciar cómo estudiantes de diversos puntos del país se acercaban al lugar para hospedarse y aprender de la naturaleza.
No obstante, la situación política del país en los años siguientes complicó el panorama, cuando la urgencia por reducir gastos estatales llevó a que la responsabilidad sobre el cuidado de Villa Leonor pasara a la Provincia de Córdoba y posteriormente, a la Municipalidad de Unquillo.


A lo largo de los sucesivos cambios de mano, el espacio fue perdiendo su encanto e incluso los servicios y prestaciones básicas, como el acceso al agua potable, se volvieron difíciles de sostener. Incluso se llegó a hablar de pasarlo a la órbita privada, algo que afortunadamente no sucedió.
Fue recién en mayo de 2016, gracias al trabajo conjunto del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Unquillo y el Movimiento Scout de Argentina, que tímidamente se realizó un nuevo intento por abrir Villa Leonor a los visitantes.
Lamentablemente y pese a las buenas intenciones, la tragedia volvería a posarse sobre el campamento a finales del año siguiente. En octubre de 2017, un niño de 11 años murió y otros cuatro resultaron heridos tras la caída de un árbol. El accidente ocurrió a unos mil metros de la Capilla Buffo y provocó nuevamente el cierre de todas las actividades en el lugar.

Un futuro esperanzador
En este contexto, desde la UPC comentaron a este medio que el regreso de las actividades en el campamento Villa Leonor se está analizando con sumo cuidado y respeto, tanto hacia la historia como hacia la infraestructura del lugar.
“La idea es que podamos articular diferentes tipos de actividades académicas y de interés común”, sostuvo Tejeda, quien agregó que buscarán que los estudiantes de las diferentes carreras puedan realizar prácticas en el lugar.
“Las actividades que suceden en Villa Leonor hoy son gestionadas por la Facultad de Educación Física, pero cualquier modificación que se requiera en el predio es un trabajo que debemos llevar a cabo articuladamente con el Ministerio de Desarrollo Social, que es el principal responsable, y con el municipio de Unquillo”, destacó.

A su vez, añadió que en los últimos meses se realizaron varias tareas de mantenimiento, tales como la refacción de baños y cocina, la colocación de luces exteriores e interiores y la construcción de una rampa en el ingreso, entre otras acciones.
“Estamos trabajando con los estudiantes para evitar accidentes. Lo estamos realizando en etapas, analizando y evaluando qué cosas se podrían hacer con el estado de avance de las obras”, informó la entrevistada. “Ya nos están llegando solicitudes del interior del país para hacer excursiones y campamentos, porque este espacio era muy valorado y muy requerido”, añadió.
En cuanto a los precios del acceso al lugar, desde la UPC señalaron que todavía se está evaluando ese tema, atendiendo a que el objetivo es que el ingreso sea accesible, pero a su vez lo recaudado pueda ser utilizado para las tareas de mantenimiento y refacción.
“Lo cierto es que mantener ese espacio implica un costo y no hay que perder de vista eso, por lo cual la idea es fomentar que el campamento esté habilitado. Hoy estamos haciendo inversiones para que sea una realidad en el corto plazo”, sintetizó la decana.

