Existe una variedad de cuidados a tener en cuenta para no descuidar la huerta durante la temporada de verano
Por Amira López Giménez
Cada estación del año ofrece distintas características climáticas para el cultivo de verduras, frutas u hortalizas. En el caso del verano, lo más recomendable por los especialistas es haber empezado a sembrar en primavera o a fines del invierno.
Sin embargo, todavía es posible preparar un huerto con algunas especies que pueden ser cultivadas en esta estación calurosa pero va a requerir de diversos cuidados de la botánica.
Ya sea que se cuente con un huerto en altura, vertical o en sencillas jardineras en un balcón o con un patio, siempre es importante tener en cuenta qué plantar, la cantidad de horas luz que va a requerir cada especie, las altas temperaturas, y el agua necesaria para crezcan lindas y sanas.
A esta altura del partido estacionario es más sencillo empezar los cultivos con brotes que germinar las semillas, y el resultado será algo más rápido. En este artículo te contamos qué plantar en la temporada de verano y cómo cuidar de los nuevos integrantes de la huerta, aprovechando al máximo las horas luz de la estación.
Para estas especies la luz es esencial, por lo que requieren un mínimo de seis horas diarias de exposición solar. Obviamente, los días u horarios de extremo calor, como el mediodía y la siesta, es mejor protegerlas con una media sombra, o bien vislumbrar un lugar con una luz más atenuada y apta para el cultivo.
Esta época es perfecta para plantas y verduras como apio, pepino, calabacín, berenjena, albahaca, batata, calabaza, choclo, papa, pimiento y tomate. En el caso de otros verdes, como la escarola y la lechuga mejor será sembrarla a finales del verano, ya que con las altas temperaturas las hojas de estos vegetales pueden arruinarse con facilidad.
Cuidados especiales
- Revisa posibles plagas en tu huerto, en caso de encontrarlas es recomendable utilizar espermicidas, especialmente frente a caracoles y langostas. Además es mejor no olvidarse de retirar las malas hierbas que crecen frecuentemente alrededor de los vegetales.
- Regar diariamente y utilizar abonos especiales para fertilizar a la tierra son las dos actividades cotidianas y esenciales para mantener con vida a la huerta casera. En caso de vacaciones es mejor planificar su cuidado y compromiso, ya que no le puede faltar agua a ningún vegetal por más de dos días.
- Con los calores intensos, y la fuerza de los rayos del sol existe el peligro latente de que las hojas de las plantas se quemen. Para evitarlo, es necesario regar adecuadamente: a primera hora de la mañana y/o a última hora de la tarde, según la intensidad del día. Para corroborar que no le falte agua se hunde un dedo sobre la tierra que tiene la planta, si es posible hundirlo es porque está bien hidratada.
¿Sabías que es mejor un riego profundo y espaciado que uno frecuente y superficial? Hacerlo así ayuda a que las raíces busquen el fondo de la maceta o suelo, lo que las fortalece y las ayuda a ser más resistentes en momentos de sequía.
- Tampoco es bueno excederse en los abonos, lo ideal es administrarlo con moderación y seleccionar aquellos abonos con origen orgánico, sin sustancias químicas. Generalmente recomiendan esperar un mes a partir de la plantación de los brotes y colocarlo en las cantidades indicadas.