El Milenio

Noticias de Sierras Chicas

Con la bandera del esfuerzo

“Este es un trabajo que uno hace con amor y dedicación”, expresó.

A los 12 años emprendió su camino en el deporte participando en la liga local de Sierras Chicas, para luego dar el salto al fútbol de Córdoba Capital. Allí se desempeñó como jugador desde 1989 hasta 1997 en el Club Atlético General Paz Juniors.

Hernán Martínez es sin dudas un hombre forjado en el fútbol.  El actual Director Técnico Los Quirquinchos Verdes cuenta en entrevista con El Milenio su trayectoria y los objetivos de su equipo.

“Este es un trabajo que uno hace con amor y dedicación”, expresó.
“Este es un trabajo que uno hace con amor y dedicación”, expresó.

Por Valentina Grant | Ignacio Parisi.

A los 12 años emprendió su camino en el deporte participando en la liga local de Sierras Chicas, para luego dar el salto al fútbol de Córdoba Capital. Allí se desempeñó como jugador desde 1989 hasta 1997 en el Club Atlético General Paz Juniors.

Su actualidad lo encuentra dedicando todo el tiempo posible a su trabajo como director técnico de Los Quirquinchos. Al respecto, Martínez afirmó: “En el 2013 me llamó Ignacio Fastuca a armar un proyecto en el club. La verdad es que nos fue muy bien porque el primer año salimos invictos en reserva y primera”.

Martínez condujo al equipo en su primera incursión en la Liga Regional de Fútbol Colón. Allí el conjunto de Río Ceballos enfrentó el gran desafío de ser el primer equipo de Sierras Chicas en disputar el torneo. El resultado quedó a la vista, de la mano Hernán Martínez y una excelente campaña deportiva de parte de sus dirigidos, Los Quirquinchos rompieron cualquier expectativa, saliendo campeones tanto en Primera División como en Reserva en una campaña histórica para la región.

“El primer campeonato fue complicado tuvimos que adaptarnos  a lo que es la Liga Colón. Los chicos que venían de la liga de local jugaban tiempos de 30 minutos. En cambio en este campeonato al cual entramos cada tiempo dura 45 minutos, es otra cosa más profesional. Tuvimos que cambiar los entrenamientos la disposición táctica, un montón de cuestiones que hacen que el fútbol tenga otra jerarquía y nivel”, expresa el DT a El Milenio.

A partir de su fructífera temporada en Los Quirquinchos el entrenador fue convocado a trabajar en Deportivo Colón de Colonia Caroya, equipo que disputaba la posibilidad de ascender al torneo Federal B.  Allí Martínez cumplió con sus pergaminos y volvió a llevar a un equipo de primera división a una final. Esta vez  el resultado fue el menos esperado, su equipo cayó en el partido decisivo ante Belgrano de San Nicolás en Buenos Aires.

A pesar de la derrota, Martínez relata su paso por el torneo Federal C como una experiencia enriquecedora y un aprendizaje que trae consigo en su vuelta a Los Quirquinchos. “En el Federal C hay jugadores pagos, el campo de juego en el cual jugamos la final era del nivel Kempes, la infraestructura era muy buena. Fue importante para mí que me elijan de otra liga por hacer bien mi trabajo, me sirvió mucho”, declaró.

Sentido de pertenencia.

Luego de su paso por el Federal C el director técnico retomó su labor en Los Quirquinchos y hoy se encuentra encarando un nuevo torneo junto con sus jugadores y colaboradores. “Es importante decir en mi trabajo como director técnico tengo un equipo. Está el profesor Juan Aguirre, mi ayudante Marcelo Oliva y tengo un entrenador de arqueros, Julio Corradini. Tratamos de equiparar los trabajos, está claro que ninguno de nosotros puede vivir de lo que hace en el club. En ocasiones alguno no puede asistir a algún entrenamiento pero tratamos de amoldarnos a la situación en la que estamos”, cuenta el entrenador.

En este marco, Hernán manifiesta la importancia del trabajo colectivo y el compromiso con el club. Los jugadores se entrenan dos veces por semana y Martínez remarca que eso no alcanza, por lo cual cada uno intenta agregar a la preparación física con entrenamientos particulares, además de los cuidados necesarios para mantenerse en forma para la competencia.

Siguiendo esta línea plantea: “Tratamos de que cada chico se sienta útil y que tome la responsabilidad como los demás. Buscamos que sean responsables y creo que lo hemos logrado, uno puede ver  la personalidad que tienen y las ganas. Los hinchas realizan distintas actividades para colaborar con fondos necesarios para el traslado la comida, etcétera, y los jugadores colaboran siempre. Hay un compromiso muy grande lo más importante un muy buen grupo humano. Eso hace todos se sientan participes no solamente los que juegan”.

Y es que el sentido de pertenencia forma parte esencial a la hora de mejorar en un club donde los recursos no abundan. Siguiendo esa línea, Martínez cuenta acerca de los múltiples roles del cuerpo técnico en los clubes zonales: “Acá tenés que ir a buscar a los jugadores a veces, tenés que trabajar de psicólogo, hay que hacer un poco de todo. Este año en el vestuario introducimos pequeñas cosas  con el objetivo de motivar a los chicos. Por ejemplo si hace frío tenemos café, le llevamos cereales, turrones, frutas,  hace calor esta la bebida con hielo, buscamos que el jugador no tenga excusa”.

Hoy por hoy Martínez quizás no cuente con el campo de juego que quisiera para la preparación de sus dirigidos pero si se enorgullece al decir que cuenta con elementos como vallas, sogas, pelotas  adquiridos de la única manera posible para “Los Verdes”: el esfuerzo.

Con esta base y la confianza en un proceso a largo plazo, Hernán mira el futuro de su equipo y se ilusiona con crecer. “Cuando pienso en Los Quirquinchos de acá a cinco años me imagino jugando un federal C, y ascendiendo al Federal B.  Eso sería hacer historia en la región, acá tengo chicos desde Agua de Oro hasta Villa Allende, acá juega todo Sierras Chicas. Este es un trabajo que uno hace con amor y dedicación”, concluye el entrenador.

Descubre más desde El Milenio

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo