Este martes 16 de diciembre regresó a su hogar en Saldán, Rufino el pequeño de dos años de edad que sufrió la amputación parcial de su brazo en un accidente doméstico con un secarropa.
“Por momentos tiene berrinches medios raros, pero me dijeron que con el tiempo se van a ir”, explicó Patricia, su madre al citado medio televisivo.
Recordemos que todo empezó durante la mañana del miércoles 18 de noviembre, cuando la familia del pequeño se encontraba lavando la ropa y realizando diferentes tareas domésticas cuando escucharon «un ruido fuerte del tambor del secarropas», cuando se acercaron a ver qué pasaba, el pequeño se encontraba en el suelo.
No fue hasta que trataron de alzarlo para ver que le pasaba que notaron que le faltaba parte del brazo derecho. “En ese momento lo solté y empecé a los gritos. Estaba shockeada”, manifestó la madre del menor, Patricia Molina al medio El Doce Tv.
Rápidamente el padre de la criatura lo envuelve en una sábana y sale corriendo al dispensario local, mientras que otro familiar atina a introducir el miembro amputado en una pequeña heladera portátil con la esperanza de reimplantarlo.
En el trayecto el papá se desmayó por la impresión, pero afortunadamente fue asistido por vecinos que cargaron al menor en un automóvil y lo llevaron al dispensario, donde finalmente fue trasladado al Hospital Infantil.
Los médicos estuvieron más de siete horas intentando un reimplante, pero horas después de la cirugía el cuerpo del menor lo rechazó y tuvieron que volver a amputárselo.
Finalmente, este 16 de diciembre logró regresar a su hogar con sus padres.
