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Clases virtuales en tiempo de pandemia, un salto tecnológico necesario

La pandemia obligó a docentes y maestros a replantear sus estrategias educativas. Desde Nación avisaron que las clases no volverán en el corto y mediano plazo. Las desigualdades que se volvieron visibles.

  • Investigación y edición:
  • Augusto Destéfanis
  • 6to Año, Instituto Milenio Villa Allende

“La cuarentena se flexibiliza pero no para las clases”, es la frase que más fuerte se escuchó durante las primeras semanas de abril. Es un pensamiento que comparten muchos dirigentes políticos incluido el propio ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, quién afirmó que desde el Ministerio están trabajando en el armado de clases virtuales, programación especial para radio y televisión y muchas otras modalidades para ir adaptando el calendario escolar a la nueva e inesperada, realidad que toca vivir en Argentina.

La emergencia sanitaria provocada por la enfermedad Covid-19, está obligando a los sistemas educativos mundiales a dar un salto tecnológico sin precedentes en la historia humana. Sin previo aviso, docentes y maestros tuvieron que replantear todas y cada una de sus estrategias y planes educativos anuales al formato de clases virtuales para hacer frente a esta nueva realidad.

En Córdoba, el ministro de Educación de la provincia, Walter Grahovac, aseguró que “no se perderá el ciclo lectivo” a la vez que pidió a los docentes continuar dando clases de modo virtual. “Vamos a corregir lo que haya que corregir y apoyar a todos los que están participando activamente en las clases virtuales”, dijo el ministro en el programa “Siesta Animal” de Radio Mitre, el pasado 7 de abril.

Videollamadas por Skype, consultas por WhatsApp, redes sociales educativas como Edmodo y manuales en formato PDF. No existe un modelo o directriz en común sobre cual es la mejor forma de dar clases virtuales, cada docente adapta sus conocimientos y trabajos según las herramientas digitales que tenga a mano.

Ejemplos virtuales


Conéctate con la Escuela” es el plan educativo que actualmente, se está ejecutando en la provincia de Tucumán, donde se prevé la creación de un portal educativo de acceso libre con material educativo adaptado para dar clases de forma online. El mismo, cuenta con vídeos, tutoriales, manuales, lista de libros recomendados y adaptados para dar clases a niveles primario, secundario y terciario. “La idea es que se pueda poner al alcance de toda la comunidad educativa todo material que sirva para que los docentes puedan realizar tareas con sus alumnos en este período de suspensión de clases”, comentó para la prensa Gabriela Barraza, integrante del equipo de Desarrollo Tecnológico de Tucumán.



Además, se dispondrá un referente pedagógico digital por escuela que intervendrá en todos los grupos de WhatsApp de cada institución. “Se pone en marcha un movimiento de apoyo virtual a la educación, lo que se hace es preservar por motivos sanitarios las clases presenciales”, sintetizó Juan Pablo Lichtmajer, Ministro de Educación de Tucumán.

Por su parte, en la provincia de Misiones está “Guacurarí“, un espacio que si bien, existe desde hace más de 5 años, en las últimas semanas tomó una relevancia nunca antes vista. Se trata de un campus virtual, donde un docente puede crear un aula virtual y subir y administrar todo tipo de contenido y tener un seguimiento más personas con sus estudiantes.

“Estamos en una situación de emergencia. A veces esas situaciones son una oportunidad. En la provincia hace años estamos apostando por la innovación educativa. Fuimos trabajando en formación docente continua y desarrollo de materiales. A la plataforma se puede acceder desde computadores o celulares. Creemos que podemos dar una solución rápida, real y de impacto para que este período no se transforme en unas vacaciones” sostuvo el ministro de Educación de Misiones, Miguel Sedoff para el medio El Territorio.

Finalmente, otra de las provincias que adaptó el formato digital fue San Luis. Aunque, a diferencia de las dos anteriores, optaron por usar directamente, los servicios digitales que ofrece la plataforma de Google, “Clasroom”.

“Dado el trabajo realizado por el Ministerio de Educación, junto con la Universidad de La Punta (ULP), la provincia de San Luis se encuentra en condiciones de poner en marcha este lunes 6 de abril las clases a través de la plataforma virtual Classroom de Google, habiéndose creado 22.500 aulas virtuales, para los más de 124.500 alumnos registrados”, informó el ministro de Educación Andrés Dermechkoff. Se estima que más de 120 mil estudiantes sanluiseños están continuando sus clases en este formato desde el pasado 6 de abril.

Educación virtual en Sierras Chicas


La región de Sierras Chicas, no escapa a la necesidad de dar el salto tecnológico y son muchos los docentes de la región que tuvieron que adaptarse a las nuevas reglas de juego que los tiempos de pandemia imponen.

La docente, Daiana Zilioli del Instituto Educativo Milenio de Villa Allende, comentó su experiencia en cuanto al modo de dar clases virtuales y cual debería ser el rol del docente en estos tiempos. “En un primer momento empezamos a utilizar todos las misma plataforma como lo es Edmodo, luego comenzamos a utilizar otro tipo de herramientas como audios, podcast, whatsapp y zoom. Tratando de estar permanentemente conectado con los alumnos para realizar las tareas”, comentó la docente. “Creo que a diferencia de otros momentos nos centramos mucho más en el acompañamiento hacia los estudiantes antes que centrase tanto en avanzar con los temas del año, ir de a poco y profundizando más cada tema”, sostuvo la docente de IMVA.


A diferencia de otros momentos nos centramos mucho más en el acompañamiento hacia los estudiantes antes que centrase tanto en avanzar con los temas del año, ir de a poco y profundizando más cada tema”. Daiana Zilioli, docente de IMVA.


Además, Zilioli consideró que este tiempo de incertidumbre en cuanto la vuelta de la normalidad de clases, es un momento para replantear no solo los métodos tradicionales de dictar clases, sino también de analizar críticamente, las diferencias sociales existentes, atendiendo que no todos tienen acceso a los mismos medios digitales. “Creo que es un momento de oportunidad para rever nuestro rol docente y nuestras prácticas pedagógicas. Pero consideró también que es un tiempo que deja entrever por un lado las desigualdades existentes desde siempre y que ahora más que nunca significan un obstáculo para el aprendizaje” aseguró.

Al mismo tiempo, la docente planteó la inevitable cuestión de que no todas las familias tienen los mismos accesos a la educación y que el rol de la escuela no se limita solo a la transmisión de información. “La brecha digital que por momentos creíamos que se estaba acortando, ahora podemos ver qué no, que no todos y todas las estudiantes tienen acceso a Internet, ni mucho menos a un celular, tablet, notebook, pc, etc. Por lo cual hace que en muchos casos dependan de fotocopias a retirar en las escuelas y esos también para algunas familias es problemático. Es decir que por un lado podemos pensar que es un momento para poner en evidencia esas desigualdades para trabajar en ello, para capacitarnos a la fuerza en el uso de Tics”.

La desigualdad en tiempos de pandemia


Madres haciendo filas para recibir material impreso en Paicor (Foto La Voz)


Pero este salto tecnológico en tiempos de cuarentena, trajo a colación otro tema bastante importante, el de la desigualdad en cuanto al acceso de la educación virtual. “Están las dos caras: los que tienen Internet y pueden, y los que no, que están más atrasados. Me da pena, tristeza. Me duele porque vivo en el barrio y conozco a los chicos que realmente no tienen Internet”, comentó Alicia Medrano, maestra de segundo grado de la escuela Ricardo Nasiff, en IPV Argüello, al norte de la ciudad de Córdoba al medio La Voz del Interior.

Es una situación que se repite en toda la provincia, donde son muchos docentes que optan por dejar el material educativo en librerías, fotocopiadores de barrio y hasta en comedores para garantizar a sus estudiantes el material didáctico que otros pueden recibir en el formato virtual.

“Vamos a usar la vieja tecnología: papel y lápiz”, fue la respuesta de Walter Grahovac, ante la consulta de varios medio sobre la falta de acceso de materiales virtuales para los sectores más vulnerables de la provincia. “En esta circunstancia no podemos resolver ni en Córdoba ni en el país esa desigualdad de acceso a las tecnologías. Lo que sí está muy extendido es el Whats-App y muchos van alternando la vieja tecnología del papel y el lápiz con los WhatsApp. Pero vamos a poder tener un balance real un poco más adelante”, sostuvo el ministro de Educación cordobés.

Finalmente, otro punto a resolver es como evitar que las clases virtuales se vuelvan una sobrecarga de textos por leer y trabajos por realizar sin el respectivo acompañamiento docente que ayude a interpretar ese material. “Mi intención no es solo aprobar sino aprender. Y en este sentido es necesario escuchar sus reflexiones y explicaciones, realmente es muy rica la preparación y experiencia de muchos docentes”, comentó una estudiante universitaria de comunicación social en un grupo de estudio de la carrera ante su preocupación por la forma del dictado de clases.

“Las aulas virtuales son solo foros y espacios de entrega de trabajos prácticos. Básicamente son casi obsoletas en estos tiempos con la riqueza de herramientas y las cientos de opciones incluso mas fáciles que el aula virtual. Es decir, siento que nos mandan a leer miles de cosas sin sentido ni orientacion”, se lamentó.

Zoom, la herramienta digital que nació ante la necesidad


Zoom es una herramienta de telecomunicación que nació a finales de 2011 como una alternativa a las videoconferencias que ofreciá Skype de Microsoft y el WhatsApp de Facebook, que comenzó a popularizarse a raíz de la cancelación de clases y el pase al modo digital en muchas escuelas de todo el mundo. Según su creador, el chino-estadounidense Eric Yuan pasó de unas 10 millones de conexiones diarias a más de 200 millones en menos de un mes.

La aplicación permite a más de 100 personas establecer una misma vídeo llamada y crear salas de reuniones individuales. Su uso creció tanto, que no solo son muchos los docentes que prefieren dar sus clases por medio de esta aplicación, sino que además. fue la plataforma elegida por la Facultad de Ciencias de la Comunicación (FCC) para realizar el pasado miércoles 8 de abril la colación de grado 2020.



No obstante, en los últimos días Zoom estuvo bajo el ojo de la tormenta debido a las criticas sobre la pobre forma que tiene la aplicación de asegurar la privacidad de sus usuarios. Algunos distritos escolares en Estados Unidos han comenzado a prohibir la aplicación para el aprendizaje en línea, mientras que otras empresas como Google y SpaceX, prohibieron su uso a sus empleados por miedo a filtraciones de seguridad, según lo publicado por The Washington Post.

Desde el blog oficial de Zoom, aseguraron que tomarán todas las medidas necesarias para aumentar el nivel de seguridad de la aplicación y pidieron perdón por las posibles filtraciones de información que ocurrieron durante la última semana. “Reconocemos que no hemos cumplido con las expectativas de privacidad y seguridad de la comunidad y las nuestras”, comentó Yuan: “No diseñamos el producto con la previsión de que, en cuestión de semanas, todas las personas del mundo estarían de repente trabajando, estudiando y socializando desde casa”.