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A cuentagotas

A pesar de las constantes lluvias de los últimos meses, la crisis hídrica y el alarmante nivel del Dique La Quebrada sigue siendo la piedra en el zapato para Sierras Chicas.

  • Colaboración:
  • Lucía Vélez, Rocío Fernández y Malena Petroli.
  • Ana Sánchez, Candela García.
  • Franco Lehmann y Cayetano Bellomo.

Históricamente la Provincia ha tenido problemas con el agua, escasez y exceso son los polos opuestos de la misma balanza que parece nunca equilibrarse.

A casi tres años de la inundación, los municipios declararon el estado de emergencia hídrica para cada comunidad del corredor serrano.

Ahora, la gran preocupación es el nivel del embalse La Quebrada que suministra este servicio a Río Ceballos, Salsipuedes y una porción de Unquillo.

Según los informes publicados por la Planta Potabilizadora de La Quebrada, con las lluvias que alcanzaron unos 130mm (milímetros), se recuperó alrededor de 1 metro. 

Asimismo, los ríos que abastecen al embalse, como Los Hornillos y Colanchanga, no aumentaron su caudal y el Dique sigue manteniendo un bajo nivel.

En términos ambientales se explica que gran parte de las precipitaciones son absorbidas por el suelo conformando los ríos subterráneos y las napas, o bien se escurre en la superficie alimentando a los ríos.

De esta manera, la planta potabilizadora sólo extrae una porción de esas lluvias para el suministro de agua.

Un detalle no menor es que, actualmente, el único dique de Sierras Chicas abastece sólo al 60% de la población de Río Ceballos, parte de Salsipuedes y Unquillo.

Durante el mes de octubre la planta potabilizadora extrajo un promedio de 5474 m3 (metros cúbicos) de agua para sustentar esta porción de la población. El resto de los vecinos serranos, dependen de otras plantas como el acueducto La Calera que se abastece del Dique San Roque.


“La idea es descomprimir el consumo en todo el corredor de Sierras Chicas y poder llegar con agua hasta Salsipuedes, a través de los bombeos”. Alan Bassi 


Por su parte, noviembre mostró una luz de esperanza ya que el dique logró aumentar, a cuentagotas, su nivel.

Poco, pero esperanzador, si se considera a Mario Navarro, meteorólogo con observatorio en Salsipuedes, quien describió a la crisis como pasajera y estimó que para los meses de marzo y mayo del año siguiente el dique La Quebrada volverá a tener un nivel de agua aceptable.

El Milenio: ¿Las constantes y últimas lluvias representan un alivio frente a la posible crisis?

Mario Navarro: Lo que pasa es que hemos tenido varias crisis con el mismo estado del dique.

Días atrás tuvimos un crecimiento en el Dique La Quebrada, ya no va a retroceder, al contrario, va a ir aumentando.

Debemos tener en cuenta que todos los años en que hubo crisis importantes, como las del año 2008, 2011, 2013, durante ese tiempo siempre hemos tenido lugares con lluvias muy importantes y por más que haya existido una crisis, al próximo año ya tenemos crecidas importantes de los ríos, comienza la neutralidad moderada o el “niño débil”.

Eso me hace sostener que los próximos meses o bien, para marzo y abril del año que viene el dique estará prácticamente lleno o en su máximo nivel.



EM: ¿Entonces no deberíamos alarmarnos frente a la crisis hídrica?

MN: Hemos tenido cinco crisis y todas ellas fueron iguales, lo que sí ha empezado a aumentar es la cantidad de precipitaciones.

En el mes de octubre en Sierras Chicas hubo un promedio de 118 ml con respecto al año anterior que fue solamente de 23 ml.

El mes de noviembre superó los 120 ml.

EM: ¿Por qué desde su perspectiva se ha declarado la crisis hídrica?

MN: Lo que pasa es que hemos tenido un año muy seco, en especial durante el mes de enero, parte de febrero y marzo donde ha llovido 218ml, cuando la media general es de 540ml.

Recién a partir de mediados de abril o inicios de mayo, cuando comenzaba el otoño, tuvimos un evento (lluvia) de 130ml, que fue un récord y de ahí en más se dieron varias lluvias, pero muy chicas.

Si consideramos que durante las estaciones el ciclo de lluvias es de 680ml y solamente llovieron 233 ml, entonces no hubo la cantidad de lluvias necesarias.

Primero, en el 2017 el verano ha sido muy caluroso y con mayores días con cielo despejado y sin lluvias.

Este año en particular, es totalmente diferente: septiembre, octubre, noviembre y diciembre del año pasado eran de mucho calor y solamente habíamos tenido seis eventos. En este año ya van nueve.

Creo que la crisis hídrica va a menguar a partir de la última semana de diciembre, comienzos de año nuevo, que ya esperamos haber acumulado alrededor de 300ml o 400ml.

EM: ¿Por qué se considera al Dique La Quebrada como el único embalse de la Provincia que ha bajado considerablemente su nivel?

MN: No, también está el Dique La Viña que tenia 15.57mts abajo del nivel del vertedero.

El otro dique que tuvo baja es El Cajón y Pichanas también, con 13.7mts abajo.

Hay tres diques que están complicados, pero si empieza a llover desde ahora hasta marzo o mayo del año siguiente todos los diques van a estar en máximas condiciones.

Y a partir de diciembre y parte de febrero, si se siguen sosteniendo las lluvias de 130 o 150ml por mes, vamos a estar en una perspectiva totalmente relevante.

En este año en particular y el año que viene en Sierras Chicas, las cuencas altas van a tener lluvias sustanciales.

El año pasado llovía en las cuencas medias y bajas, no llovía tanto en las cuencas altas.

En este año, ha llovido en las cuencas altas un promedio de 130ml y en esto, las costas de La Quebrada han sido beneficiadas porque brindan una alimentación de entre 18 y 23 km, en cambio los otros ríos tienen más de 40 km.

Entonces, la absorción del río es de una corta distancia, no es muy alta y eso hace que el acopio del río sea bajo.

Pero, a partir de ahora con los recursos naturales que contamos y con los movimientos de suelo, la mayor parte del caudal se va a dirigir al dique, por lo tanto, para el próximo año, a mitad de primavera y verano, las condiciones van a cambiar en un 50%.

EM: ¿Sería necesario aplicar una serie de obras para prevenir otras crisis?

MN: Sí, y hay muchos elementos y propuestas para los diques que siempre están en altura, pueden ser diques de contención o integradores de retardo, sistemas biodegradables o ecológicos, que, poniéndolos en las cuencas altas, con la lluvia se puede acumular y no se pierde el agua.

Hay un sistema para hacerlo, es barato, y se puede hacer para todas las Sierras de Córdoba, es una inversión que a largo plazo puede traer agua permanentemente, con la mineralización adecuada y con el abastecimiento idóneo para los riegos de siembra en lugares realmente complicados.

Hacia nuevas fuentes de agua, alternativas a la crisis

Frente a la declaración de emergencia hídrica, en cada una de las viñas serranas, las distintas comunas aportaron nuevas soluciones: restablecer los pozos de agua más importantes para apoyar al suministro de agua.

Unquillo es la primera ciudad en restablecer los pozos anulados por el paso del tiempo y otras cuestiones. Sin embargo, no es la única ciudad, Río Ceballos también aportará con fuentes de agua alternativas al dique.

Esta iniciativa proviene del gobierno de la provincia de Córdoba y trae consigo una paradoja particular: volver a abrir los pozos que fueron cerrados frente al desarrollo de los diferentes embalses.

Por su parte, Unquillo volverá a inaugurar dos pozos: uno se encuentra en la zona del Ex Frigorífico y el otro es el pozo Malvinas (ubicado en el Puente Estela). Ambos necesitan reparaciones, mientras tanto, están previstos para brindar apoyo al suministro de agua de las viñas aledañas. Así lo confirmó Alan Bassi, Director de Obras Privadas y Asesor Hidráulico de la Municipalidad de Unquillo. La idea es “descomprimir el consumo en todo el corredor de Sierras Chicas y poder llegar con agua hasta Salsipuedes, a través de los bombeos”.


“Creo que la crisis hídrica va a menguar a partir de la última semana de diciembre, comienzos de año nuevo, que ya esperamos haber acumulado alrededor de 300 ml o 400 ml”. Mario Navarro


Vale aclarar, que el pozo principal en reactivación está ubicado debajo del actual puente Estela, y se está ejecutando de manera conjunta con el Gobierno Provincial. Décadas atrás, éste abastecía a la ciudad de Unquillo y llegaba a entregar unos 100 metros cúbicos por hora aproximadamente. Pero se vio fuertemente afectado por las inundaciones de febrero de 2015, quedando sólo una parte en funcionamiento.

“Se va a volver a realizar una galería filtrante, con todos los equipos de bombeo en ambos pozos, para poder contar con ellos como fuentes de abastecimiento complementaria a las ya existentes de Sierras Chicas que son el acueducto La Calera o La Quebrada. La idea de la Provincia es recuperar todos los pozos que sean posibles, pozos históricos de Sierras Chicas, como también se está haciendo con el pozo de la pileta Arco Iris en la zona de Río Ceballos”, sostuvo Bassi, y agregó: “Ahora por suerte se está recuperando, pese a que la cuenca de aporte es chica y tiene que llover en esta cuenca una buena cantidad.”

DATOS


El promedio mensual histórico del dique La Quebrada ha sido de -3.73mts.

El récord de bajante del dique data del 31 de octubre de 2013, cuando llegó a 20,14 mts, a -13,86 mts del nivel de vertedero.

Río Ceballos, Unquillo y Salsipuedes son las localidades que en mayor medida dependen de la provisión de agua de La Quebrada.

La cuenca en La Quebrada es de 4.200 ha. A su vez, los ríos que abastecen al Dique son significativamente pequeños respecto de los Diques en la Provincia de Córdoba (el San Roque tiene una superficie 40 veces mayor a la ubicada en las Sierras Chicas). Esta diferencia, es sustancial a la hora de aprovechar la capacidad de ingreso de agua que hay en la zona.

La capacidad de retención de la cuenca, depende de la vegetación. En la medida en que exista un “colchón” de árboles y arbustos nativos, aumenta la capacidad de absorber paulatinamente el recurso y de prolongarlo en el tiempo. Sin embargo, los incendios ocurridos en la cuenca alta, sumado al avance de la urbanización en la región, impactan negativamente en el suelo provocando desertificación.

Al 7 de diciembre del 2018 el dique registra -12.19 mts por debajo de su nivel.