[dropcap]E[/dropcap]l pasado 24 de julio, la Municipalidad de Mendiolaza y la consultora Ambar dieron el primer paso del estudio del nuevo sistema de gestión de los Residuos Sólidos Urbanos, destinado a arrojar datos acerca de como está compuesta la basura de los habitantes de la ciudad-campo.
Entrevistamos a la ingeniera María Eugenia Vanzetti, especialista en higiene y seguridad en el trabajo de la Municipadad de Mendiolaza, quién nos informó acerca de como avanza el estudio.
El Milenio: En lineas generales, ¿cuál es el proceso que van a utilizar los recolectores a partir de ahora?
MEV: Es un nuevo proceso de acuerdo a las normas IRAM. Está destinado a clasificar y saber que tipo de basura en Mendiolaza. Como ya no hay lugar para segur arrojando basura en Córdoba, hay que disminuir los volúmenes. Se van a poner puntos verdes en diferentes lugares de Mendiolaza para que se pueda hacer una diferenciación de la basura.
Se hace este estudio para ver que tipo de basura y que cantidad de cada tipo tenemos en Mendiolaza. Con esto, buscamos ver cuantos puntos verdes hay que poner exactamente.
Seguimos las norma IRAM 29.523, que nos da todas las clasificaciones para hacer correctamente esta clasificación de residuos sólidos urbanos. Hay cierta cantidad de bolsas que la consultora Ambar definió. Entonces, se abre cada bolsa y se divide lo que hay dentro en los diferentes tipos de basura que hay: inorgánica, orgánica, comestible, madera, papel…
Los muchachos de Ambar van a hacer un estudio de acuerdo a esta norma para sacar los indices que ellos necesiten para definir cuantos puntos verdes hay que poner.
EM: ¿Qué expectativa tienen de cara al futuro respecto a este tema?
MEV: Personalmente, creo que es algo que mira al futuro. No se puede seguir tirando todos los residuos como si la tierra pudiese sostener toda nuestra basura. Hay que buscar otras formas: reciclar, darle otro uso a la basura… básicamente, hay que disminuir la cantidad de residuos a tratar.
EM: ¿Cómo cree que el vecino se tome el reciclado?
MEV: Hay gente que lo toma bien, y hay otra que lo toma mal. En mi caso particular, separo la basura desde hace cuatro, cinco años. La gente que no lo hace no es por mala voluntad de su parte. Hay que crear conciencia, hay que aprender a hacerlo. Tenemos que pensar que el mundo avanza y la tierra necesita que nosotros la ayudemos a poder seguir acá y creo que los vecinos se van a sumar. Cuando la gente entienda, lo va a hacer, va a llevar la basura a cada punto verde.
Fotografías: Eduardo “Ninja” Parrau para El Milenio.