Así le manifestó a El Milenio Leonardo Santucho, tras conseguir nueve campeones en el Torneo Panamericano de Karate junto a su Escuela de Artes Marciales. En este sentido, denuncia que la Municipalidad de Unquillo no colaboró con los deportistas.
Leonardo Santucho es el Director de la Selección de Karate Cordobesa, por lo que una vez por mes entrenan en Unquillo jóvenes de toda la provincia.
Por Redacción El Milenio
En la actualidad, Leonardo Santucho se convirtió en el representante más importante del karate en las Sierras Chicas. Con respecto a esto, el sensei unquillense tiene como logro ser cinturón negro sexto dan, además de dirigir la Selección Cordobesa de esta disciplina.
También cuenta en su haber con reconocidas escuelas en varias localidades del país, donde chicos y adultos participan perfeccionándose en este deporte tan popular en Argentina.
En esta línea, hace pocas semanas viajó junto a sus escuelas de karate al Torneo Panamericano que se realizó en la ciudad de Río Tercero. Se trató de un evento internacional donde competidores de toda América buscaban la clasificación directa para el mundial que se realizará en Bulgaria en el año 2016.
De la escuela de Santucho fueron nueve representantes de Unquillo, a los que se les sumaron diez más desde la sucursal que tiene en la provincia de Salta. Con respecto a esto, los resultados fueron muy buenos, ya que se obtuvieron nueve campeones, tres subcampeones y siete terceros puestos internacionales.
Pero no todo fue tan fácil, y aunque se trató de una competencia de gran nivel, no tuvieron ayuda de ningún tipo por parte de las autoridades de la Municipalidad de Unquillo.
“Esto se hizo todo a pulmón”, mencionó a El Milenio el reconocido deportista, ya que para poder viajar a la ciudad organizadora del campeonato, y cubrir los gastos de estadía y comida, tanto los padres como el equipo de Seibukan vendieron empanadas, además de realizar otras actividades.
“Yo golpeé muchas puertas acá en Unquillo, primero fui a hablar con el intendente, Germán Jalil, a través de su secretaria, pero de ahí me mandaron a dialogar con el Secretario de Deportes, Manuel Vera”, explicó frustrado el deportista tras tantos obstáculos que tuvo que sortear.
Fue así como el maestro decidió seguir insistiendo con el Secretario al que fue derivado, el cual le pidió que elevara un nota; “la acerqué pero nunca supe si la leyeron o no la recibieron porque no me llegó respuesta alguna, ni por el sí, ni por el no”, cuestionó.
Entonces, al no recibir ningún llamado telefónico, decidió volver a intentarlo pero no le atendieron el teléfono desalentándolo aún más.
Como en todo concurso, explica el entrenador, hay gente a la que no le significó mucha inversión económica este viaje al Panamericano, pero para varias familias de los competidores la suma con la que debían disponer era muy significativa, e incluso varios deportistas se quedaron sin poder ir al torneo.
“Por ejemplo, en mi caso tuve que dejar cuatro días de trabajar para poder viajar, además de que mi familia no me pudo acompañar porque significaba mucho gasto”, reconoció Santucho.
“Lamentablemente no tuvimos la ayuda de la intendencia ni de nadie, pero el resultado obtenido fue muy alentador para el futuro de este deporte en la región, porque fueron muchas las medallas que se trajeron a un pueblo chico, donde aún no existen los recursos suficientes que necesitan quienes practican esta disciplina”, agregó el sensei.
Pero el entrenador augura un futuro muy alentador debido al potencial deportivo que existe en todas las Sierras Chicas, aunque su preocupación sigue estando por la falta de interés de quienes pueden hacer crecer estas actividades.
Por último, y a través de este medio, pidió “la posibilidad de reunirse con el Intendente Jalil para que le expliquen el motivo por el que no los apoyaron”.
Junto a los campeones.
Desde los 9.
Leonardo Santucho tenía tan solo 9 años cuando dio sus primeros pasos con el karate, y fue su primo, el cual llevaba varios años practicándolo, quien lo lleva a una academia. Desde ese entonces, nunca abandonó las prácticas.
“Hoy mi primo, Luis Mansilla, es mi alumno más avanzado”, dijo orgulloso de quien lo introdujo en su gran pasión.
Los primero logros comenzaron a reflejarse durante la adolescencia, y a la edad de 17 años el sensei de Unquillo, Henrique Godoy, lo graduó cinturón negro 1º dan. Tiempo después, se mudó a la ciudad de Buenos Aires donde siguió el aprendizaje.
Estos esfuerzos comenzaron a dar sus frutos en la vida profesional de Santucho; en este sentido, compitió en torneos libres, es decir, donde participaban varias artes marciales como taewondo, karate, apkido, kung fu, etcétera.
Pero desde el año 1994, el talento del unquillense se demuestra en distintas competencias nacionales y de nivel mundial. Vale destacar su participación en diferentes seleccionados representando al país con diversas especialidades como Kumite y Kata. Obteniendo campeonatos mundiales, y hasta en algunos casos fue el único representante argentino.
En plena expansión.
Leonardo Santucho le cuenta a El Milenio que la idea de poner una academia fue para poder transmitir toda la experiencia adquirida a través de los años. Es así, que cuenta con filiales en la localidad salteña de Orán, Ingeniero Maschwitz y próximamente en Catamarca, además de la sede central que se encuentra en Unquillo, dentro de la Academia Sello Latino.
“A nivel tradicional, la enseñanza forjó mi carácter, me dio una disciplina, me enseñó a ser humilde, respetuoso y por sobre todas las cosas a lograr la paz interior, en pocas palabras, el karate para mi es una forma de vida, ya que todo lo aprendido lo vuelco a la vida en sociedad”, concluyó.