- Por Agostina Budrovich.
- 5to Año, Instituto Educativo Nuevo Milenio.
Los problemas que suscita la pandemia se traducen en un sinfín de aristas que afectan a la sociedad. En este marco, la cuestión económica y la adversidad que algunos sectores deben atravesar para acceder a un plato de comida, es cada vez más preocupante. Para los vecinos unquillenses de Quebrada Honda y Forchieri, así, es el momento de no quedarse con los brazos cruzados y actuar. Desde la solidaridad, surgieron entonces, dos proyectos caracterizados por concebirse dentro de hogares particulares. Las iniciativas tienen lugar a partir del mero propósito de ayudar, en tiempos complejos.
Celeste Pino, Lucia Gómez y Micaela Mendoza hace tres meses constituyeron un merendero, tras el cierre de un espacio semejante en el barrio, Quebrada Honda. Hoy por hoy, funcionan en distintos puntos, sin un lugar fijo, en las casas de ellas mismas, ofreciendo la merienda una vez al día.
El proyecto solidario opera de lunes a lunes de 15:00 a 18:00 hs. siguiendo las medidas sanitarias solicitadas por el gobierno, como el lavado de manos y el uso obligatorio de barbijo.
La ayuda se extiende actualmente a 15 familias desempleadas y a más de 30 niños y niñas que necesitan apoyo escolar. Su principal sustento son las donaciones de vecinos y amigos, además del sostén de quienes lo administran.
Las organizadoras contaron a El Milenio los planes a futuro y la proyección que anhelan para el merendero: “Nos gustaría tener un espacio físico para poder servir allí la merienda diaria y realizar actividades recreativas para los niños y las familias. También poder ser reconocidas por el gobierno o el municipio para tomarlo como fuente de trabajo.”
Las donaciones siempre son bienvenidas para un proyecto que sobrevive, principalmente, gracias a la colaboración. Para consultar las direcciones donde acercar las donaciones, pueden comunicarse al teléfono 3517630977
Más de 30 niños y más de 15 familias asisten a la propuesta promovida por las vecinas. Foto gentileza.
Por su parte, Luis Eduardo Pérez concibió un sitio en las mismas condiciones. El objetivo fue colaborar con quienes, producto de la situación mundial, están en una coyuntura compleja. Con el apoyo de vecinos y el Partido Justicialista de Unquillo acondicionó su casa para hacer funcionar la propuesta. El merendero se encuentra ubicado en el barrio Villa Forchieri, en la calle Los Ceibos al 680.
Actualmente, ya son más de 30 niños y niñas que asisten día a día a merendar, y que con el apoyo de la comunidad pudieron festejar el Día de las Infancias. Luis aseguró: “En esta situación nos necesitamos el uno al otro y nos debemos ayudar.” Por lo cual, respetando las precauciones, cada niño pudo recibir juguetes y golosinas aportadas por el Instituto Educativo Nuevo Milenio, los Bomberos de Unquillo y residentes del barrio.
El merendero funciona gracias al apoyo entre vecinos. Foto gentileza.
El Día de las Infancias, celebrado en agosto, fue una jornada de festejo en el merendero. Foto gentileza.
A futuro, desde la organización quieren ofrecer almuerzo y cena, por lo que necesitan donaciones. Foto gentileza.
A la par, afirmó que “aunque no se vea, uno camina todos los días y nota la necesidad que hay en el barrio”. En base a eso, declaró que el siguiente objetivo a lograr es poder incorporar el comedor para ofrecer también almuerzo y cena.
Para poder cumplir la iniciativa necesitan principalmente donaciones de carne y verduras. Para aportar, contactarse al número 3513368055
