Fotografía: Agostina Canova
Colaboradores: Constanza Acevedo, Thomás Lescano y Conrado Acosta 4to Año IMVA, Rocío Robledo, Gabriel Klipka 4to Año IENM.
La compra-venta online es una práctica en expansión. A través de tiendas virtuales o de sitios web como Mercado Libre, los vendedores, ya sean empresas o particulares, pueden prescindir cada vez más de los locales físicos.
Además, la rapidez y la comodidad de esta alternativa son ventajas que muchos compradores aprovechan. Así, el mercado virtual no sólo está cambiando las formas de venta, sino también los hábitos de consumo de la población.
El sistema, que ya abarca desde comida hasta viajes, básicamente consiste en la publicación de una foto del bien o servicio que se ofrece, anexando una descripción y el precio. El cliente potencial se contacta con el vendedor y ambos coordinan la transacción, que generalmente incluye diversos medios de pago. Luego, el comprador recibe el producto a través de algún sistema de envío o lo retira personalmente.
Drop shipping
Tras vincularse con una fábrica de muebles que estaba incursionando en esta tendencia, Gustavo Suárez decidió encarar un proyecto basado en la compra-venta online. Junto a Martín Lescano, vecino de Mendiolaza, emprendieron una capacitación en FIDE – Incubadora de Empresas, que les permitió conocer distintos modelos de negocios dentro de este rubro. Uno de ellos es el denominado “drop shipping”, un tipo de venta donde se terceriza la producción, es decir, se adquiere la mercadería lista para vender, y la compra se lleva a cabo online.
Mediante este sistema, Lescano y Suárez comercializan sillones virtualmente a través de GM Tu Mueblería Online. “Somos un nexo entre el comprador y el fabricante del producto. Externalizamos algunas características de este modelo de negocio y viene funcionando bien”, explicó Suárez y agregó que cuentan con un espacio físico, pero con muy poco stock, ya que en realidad trabajan principalmente a pedido, vía internet.
“Lo principal es la venta online, nos dedicamos 100% a eso y utilizamos un sitio web con tienda. Nosotros promocionamos los productos, el cliente se comunica a través del chat y ahí le enviamos los modelos, colores, medidas, etc. Una vez que se define eso, pasamos el pedido al fabricante”, señaló Suárez y añadió que luego gestionan la entrega del producto directamente al cliente. Además, también utilizan Facebook e Instagram, medios a través de los cuales abordan públicos diferentes “en edad, tipo de consultas y hasta rapidez en la decisión de compra”, según señalaron.
Concentrar, la clave
Para más información, ingresar a gmtumuebleriaonline.com, también en Facebook e Instagram.
El primero en apostar a la venta online fue Luciano, un amigo de Gustavo que se animó a incorporar las redes sociales a su negocio de muebles. A partir de esa idea, Suárez y Lescano se iniciaron en el drop shipping, con Luciano como proveedor exclusivo de los sillones que ofrecen.
Aunque otras mueblerías “tradicionales” han querido unirse al sistema de GM, ellos han decidido mantener el esquema de organización original. “Tener centralizada la producción y que todo salga de una misma persona es una de las bases de este negocio”, explicó Suárez, aunque aclaró que las materias primas (como telas y maderas) sí provienen de distintos orígenes.
Asimismo, los emprendedores apuntaron que se concentran en pocos productos, ya que así se facilita la compra. Lo mismo sucede con las opciones en materia de colores, telas y maderas. Con respecto a los principales destinos de sus envíos, San Luis, Rosario y Córdoba son sus mercados más importantes, indicaron.
“El comprador de internet es especial, tiene gustos particulares y generalmente busca inmediatez. Por ahí no tiene tiempo de ir a un local y una de las ventajas de este sistema es el tiempo que te ahorrás”
A paso lento, pero seguro
Más allá de su notable expansión, mucha gente aún desconfía del comercio virtual. Quizás eso explica por qué, del total de ventas realizadas en Argentina, “sólo un 3% se llevan a cabo de manera online”, mientras que, en otros países, como China, la mitad de las transacciones comerciales se realizan virtualmente, como comentó Gustavo. “En Latinoamérica el porcentaje es muy bajo, pero Argentina viene en aumento”, añadió.
Asimismo, contó que incluso él mismo padeció el fraude al comprar por internet y apuntó que “hay empresas que traen productos mediocres y eso fue socavando la confianza del consumidor”. No obstante, en su opinión, son las mismas compañías las que deben fomentar la seguridad para concretar y acrecentar las ventas.
“En un par de años la evolución permitirá que convivan ambos tipos de mercado, el virtual y el físico, al mismo nivel”, aventuró por su parte Lescano, al tiempo que se lamentó de la falta de diversidad en medios de pago que podría incentivar aún más esta metodología.
En este sentido, GM utiliza principalmente Mercado Pago. Con esta aplicación, tras recibir el producto, el cliente deposita el dinero y, en caso de no estar conforme, puede devolverlo. Esta técnica les sirvió para generar confianza en los consumidores y aumentar las ventas. “Tratamos de ser lo más transparentes posible”, afirmaron.
“Creo que la confianza tiene que ver con dos factores: por un lado, la empresa en cuestión, y por otro, el patrón de compra del consumidor que, al ser más instruido, busca, analiza e investiga antes de decidirse”, manifestó Suarez.
Por último, reflexionó acerca de las características del cliente online: “Es un comprador especial, con gustos particulares. Generalmente busca inmediatez, por ahí no cuenta con el tiempo para ir a un local, ver, comparar. Una de las ventajas de este sistema es el tiempo ahorrado: se consulta el stock y a la tarde, recibís el sillón en tu casa”.
