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Generación veggie: ¿qué nos falta saber sobre vegetarianismo?

Elisa Rivas, Licenciada en Nutrición, habló sobre las particularidades de una dieta libre de carne y sus beneficios para la salud. Además, explicó la diferencia entre veganismo y vegetarianismo.
  • Colaboración: Constanza Baigorria, Lucas Barlassina, Candelaria Garriga y Sofía Aparicio.

En la actualidad, mucha gente decide apostar a un cambio de dieta, dejando de consumir carne y otros productos derivados de animales. Si bien muchos lo hacen por cuestiones de salud, la mayoría asume la iniciativa por cuestiones ideológicas referidas al cuidado de los animales.

Sin embargo, aún hay mucho desconocimiento en torno al vegetarianismo. Para separar mitos y verdades, El Milenio entrevistó a Elisa Rivas, Licenciada en Nutrición que actualmente vive en Unquillo y se desempeña como docente en Río Ceballos.

El Milenio: ¿Cuál es la diferencia entre veganismo y vegetarianismo?

Elisa Rivas: El vegetarianismo es un régimen que excluye de la dieta todo lo que sea de origen animal, incluyendo carnes, huevos y lácteos. Es decir, un vegetariano estricto no come nada de origen animal. El vegano entraría en esa categoría, pero traslada esa restricción a todos los ámbitos de su vida, no sólo el alimenticio. Por eso no compran prendas de cuero o de lana ni consumen miel, por ejemplo.

El veganismo es una filosofía de vida. El vegano cree que las necesidades del hombre no pueden ser satisfechas a costa del sufrimiento de los animales, que son seres sintientes. De alguna manera el vegano hace una contribución al cuidado del medio ambiente, ya que consideran que dañar a los animales interviene con el equilibrio del ecosistema.

EM: Cuando uno decide cambiar a una dieta sin carne, ¿se pueden presentar dificultades?

ER: No, en realidad, una dieta vegetariana bien balanceada no tiene por qué presentar inconvenientes para la salud. Por supuesto, no es lo mismo llevar una dieta así hoy, que hace diez o quince años. Actualmente tenemos una amplia selección de alimentos a disposición de la persona vegetariana que antes no existían.

De la misma forma, un vegano puede tener una dieta totalmente balanceada, con el aporte de minerales y nutrientes que necesita, sin incluir productos derivados de animales. Es algo totalmente factible, incluso desde la niñez, aunque siempre es necesario el asesoramiento de un profesional.

EM: ¿Cómo podemos reemplazar las propiedades de la carne y otros alimentos de origen animal?

ER: Mucha gente cree que la principal fuente proteica es la carne y que, si no la consumen, se van a enfermar, no van a crecer y cosas así. Hay muchos mitos al respecto. Lo cierto es que también existen las proteínas vegetales, que se encuentran en todos los cereales y legumbres. Está el tofu, por ejemplo, que es queso de soja (un excelente reemplazo como fuente de proteínas) o el seitán, también llamado “carne vegetal”. Lo importante es combinar bien los alimentos para tener una dieta equilibrada y completa.

EM: ¿Esta dieta posee alguna contraindicación?

ER: La dieta vegetariana está ampliamente aceptada y no tiene contraindicaciones. Por supuesto que hay personas que deben tener cuidados adicionales, por ejemplo, los celíacos, que no pueden consumir gluten, pero es una precaución que deben tener en cuenta siempre, aunque coman carne.

EM: ¿Cuáles son las ventajas de la alimentación vegetariana?

ER: Normalmente, las personas vegetarianas tienen menos colesterol, menos riesgo de contraer diabetes y menos riesgo de tener sobrepeso u obesidad. Al ser una dieta basada en vegetales, estos aportan mucha fibra al cuerpo, lo que hace que sea muy saludable.

Esto no quita que una dieta que incluya carne no sea sana, todo depende del balance que uno haga de su alimentación. Los vegetarianos deben estar bien informados y consultar con un profesional, sino se puede caer en algún déficit de nutrientes.

EM: ¿La comida para un vegetariano estricto es cara?

ER: Sí. Con respecto a los lácteos, los vegetarianos y veganos consumen leche de soja, de almendras y de coco. Un litro de leche de almendras vale $170, o sea, el triple de lo que vale la leche de vaca. Hay otras más económicas, como la leche deshidratada, que se pone en un vaso y se reconstituye. Se le puede agregar cacao o preparar infusiones, las personas se acostumbran. El seitán y el tofu también son alimentos caros y no se consiguen en cualquier lado, aunque cada vez hay más opciones en este sentido.

EM: ¿Qué tipo de dietas vegetarianas hay?

ER: Como dije antes, el veganismo es un tipo de vegetarianismo. Ambos excluyen de la dieta toda la carne, sus derivados y cualquier alimento de origen animal. También existen los lactovegetarianos, que no comen carne, pero sí leche y otros lácteos, los ovovegetarianos, que incluyen el huevo como único alimento de origen animal, y los ovolactovegetarianos, que excluyen la carne, pero consumen lácteos y huevos. Esta última es la modalidad más común.

Después hay otras dietas menos difundidas, por ejemplo, las dietas crudívoras (donde sólo se consumen alimentos crudos, sin cocinar) o las frugívoras (que se basan en frutas, verduras y semillas). También están las dietas macrobióticas, que se basan en una filosofía oriental que considera que cada alimento tiene un efecto en la salud y hay que ver qué combinar con qué para lograr el equilibrio.

“Una dieta vegetariana bien balanceada no tiene por qué presentar ningún inconveniente en la salud”, afirmó la nutricionista y docente Elisa Rivas.

El veganismo como filosofía de vida

El veganismo se basa en la idea central de no consumir derivados animales en ningún ámbito de la vida. Las personas que adoptan esta filosofía sostienen el veganismo como un principio moral. Se trata de “dejar de considerar a los animales como objetos, recursos y medios para satisfacer los fines humanos”, como señala el sitio web Filosofía Vegana.

Esta decisión no sólo abarca la alimentación, sino que se extiende a otros aspectos del quehacer cotidiano. Por ejemplo, la vestimenta (las personas veganas no usan prendas de cuero, lana, pieles, plumas, etc., sólo ropa desarrollada con fibras vegetales o sintéticas) o el entretenimiento (no asisten a espectáculos donde participen animales y rechazan la caza y pesca). También se oponen a la comercialización de animales, por lo cual optan por la adopción a la hora de buscar mascotas.

A su vez, los veganos evitan productos que hayan sido testeados en animales, como la mayoría de los cosméticos y los elementos de higiene. Sin embargo, esto supone una dificultad cuando se trata de medicamentos, ya que es muy difícil conseguir fármacos que no hayan sido probados en animales.

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