Las Bombas de Semillas, creadas por los alumnos de Nuestra Señora de Las Mercedes se llevaron todos los aplausos de la comunidad de Unquillo por su valioso aporte.
[dropcap]U[/dropcap]n nuevo proyecto encarado de la mano del Instituto Nuestra Señora de las Mercedes de la ciudad de Unquillo tiene como destino concienciar a la comunidad sobre la importancia del cuidado medio ambiental y las especies nativas.
En el innovador proyecto, que se dió a conocer como «bombas de semillas» participan más de 200 chicos, alumnos de la institución educativa, cuyas edades oscilan entre los 9 y 12 años. El curioso emprendimiento consiste en bombas o bien, proyectiles, conformados de arcilla, tierra, arena y semillas de especies nativas que serán lanzadas al monte nativo de la ciudad, antes de que comience el verano.
Estas pacíficas y ecológicas bombas forman parte de «Pienso en Verde», una iniciativa de docentes y alumnos de las asignaturas especiales con las que cuenta el colegio.
“Todo surgió de la necesidad de dar una respuesta al problema ambiental que hay en las Sierras Chicas, especialmente a partir de lo que pasó con las inundaciones de febrero de 2015 y con los incendios”, explicó una de las docentes a cargo, Lorena Vittore, en diálogo con Día a Día y agregó:.“La idea nació básicamente de los mismos chicos, que nos transmitieron que algo había que hacer para ayudar a que no se siga degradando más el bosque nativo de la zona”.
Así, desde los alumnos y los docentes surge la necesidad de cuidar el ambiente regional que se encuentra bajo las constantes amenazas de la actividad humana. De esta manera, serán los mismos habitantes que buscarán cuidarlo aportando lo que el agua o el fuego se llevó; es un aporte genuino que atraviesa las puertas del colegio para llegar a la comunidad de Unquillo, con un impacto ambiental real y positivo.
Alrededor de dos mil bombas serán esparcidas por los niños de 6º grado de Nuestra Señora de las Mercedes durante el acantonamiento que se realizará en el «Valle Ocho», ubicado en el legendario barrio de Cabana. Una vez bombardeado el valle, especies nativas como aguaribay, sacha huasca, manzano de campo, sen de campo, tusca, timbo, quebracho blanco y algarrobo crecerán en sus inmediaciones, ayudando a la recuperación de estos espacios y a la prevención de los desastres naturales.
EL DATO: «La arcilla, como se endurece, protege a las semillas de la acción de los pájaros. Una vez en el suelo, cuando las condiciones se dan, la ‘bomba’ se hidrata y algunas germinan. Se calcula que de las 2.000 ‘bombas’ germinará la mitad, unas mil, con eso nos conformamos”, explicó Lorena Vittore.
