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“Este es un trabajo muy duro, no es para cualquiera”

Cada madrugada los recolectores de basura dan comienzo a uno de los trabajos más necesarios y complejos para cada ciudad.

Cada madrugada los recolectores de basura dan comienzo a uno de los trabajos más necesarios y complejos para cada ciudad. En esta oportunidad El Milenio dialogó con Miguel Espíndola, capataz general de los recolectores de Río Ceballos, y Juan Bonvín, Director de Obras Públicas de la “Perla” de Sierras Chicas.


  • Por Ignacio Parisi | ignacioparisi@elmilenio.info
  • Colaboración: Mateo Duarte y Santiago Luque. 4°B IENM.
  • Cecilia Díaz, Candela Fantini y Martina Fracchia. 4°B IMVA.

[dropcap]E[/dropcap]l Milenio: ¿Marcelo, hace cuánto se desempeña usted como recolector?

Marcelo Espíndola: Nuestro equipo empezó hace varios años y ahora con el nuevo gobierno, comenzamos de nuevo con la recolección.

EM: ¿Recolectan todos los días de la semana?

ME: Sí, toda la semana. De lunes a sábado toda la jornada y los domingos se realiza la mitad del recorrido. Estamos desde las 5 de la mañana hasta las 12 del mediodía aproximadamente. Dividimos los días por zonas.

EM: ¿De qué manera organizan los  distintos trayectos para recoger los residuos?

Juan Bonvín: Son cinco recorridos distintos, de lunes a sábado, y el domingo se realiza uno solo, que es en la zona céntrica. Cada recorrido es trazado previamente, y el vecino sabe qué día le corresponde a su barrio. Hay barrios que tienen dos días de recolección a la semana, a los cuales se les cobra una taza de servicio, y otros que cuentan con tres días de recolección y se les cobra otra taza.

EM: ¿Cuántas personas van en cada camión?

ME: En cada camión son cuatro, tres atrás y uno adelante que es el que maneja.

EM: ¿Cuántos son los que trabajan en el área de recolección de basura en total?

ME: Son 20 personas en total.

EM: ¿Tienen las herramientas necesarias para realizar el trabajo de manera adecuada?

ME: Hay algunas cosas que sí otras no, por ejemplo hacen falta herramientas de reciclado, están las máquinas pero no se han instalado todavía. Y en cuanto a nuestra seguridad lo que cuenta es básicamente la vestimenta; guantes, botines, la ropa adecuada. Pero siempre falta algo.

EM: ¿Los vecinos dejan la basura en los lugares correspondientes y de la manera adecuada?

ME: Hay de todo en líneas generales. El problema es que la gente no separa la basura, y desechan todo junto. Otro de los inconvenientes relacionados al tema tiene que ver con los perros, que están en la calle, que rompen la basura de manera constante, y aun así los recolectores se llevan la basura rota. Muchas veces ha pasado que los perros muerden a los recolectores cuando levantan las bolsas.

También nos ha tocado recolectar residuos patógenos (jeringas de hospital, o químicos contaminantes), lo cual es altamente peligroso. Estos residuos pueden tener virus que afectan a los trabajadores. Los hospitales y empresas químicas en vez de pagar un recolector especializado, van y la tiran en alguna calle o lugar determinado.

Si bien los recolectores se ocupan de cargar cada residuo que encuentran en la vía pública, resulta imperiosa la colaboración de los vecinos en relación a la división de la basura para su posterior reciclado.

EM: Con respecto a los residuos ¿En Río Ceballos aplican políticas de separado y clasificación?

JB: Se está implementando a través de la oficina de ambiente. Se está haciendo primero lo que se llama “separación de origen” que debe realizar cada vecino. En principio se trataría de algo similar a lo que ocurre con las bolsas del supermercado verde y negra. La bolsa verde es para la basura reciclable, y la negra para los desechos húmedos.

Está entre las ideas del proyecto completo, hacer hasta el compost, pero eso todavía no se encuentra en marcha. Necesitamos que una parte la haga el vecino con la separación de origen, y la otra parte la hacemos nosotros. Lo que  tenemos acá es una planta de transferencia, lo cual es muy distinto a un basural a cielo abierto. Allí nosotros llevamos y seleccionamos parte de la basura, la volvemos a cargar y la llevamos a Córdoba, a Piedras Blancas más precisamente.

EM: ¿Se podría considerar la tarea de los basureros como una de las más insalubres dentro del municipio?

JB: Yo pienso que sí, ya que la basura tiene un alto riesgo de contaminación, porque la recolección se realiza a mano, domicilio por domicilio, en vehículo en movimiento. Mientras uno va cargando la basura, puede haber riesgo de choque, muchas veces hay accidentes de tránsito ya que van en la oscuridad, por ejemplo en invierno cuando a las cinco de la mañana todavía es de noche. Por lo cual sí, el riesgo es alto. Por eso las coberturas de salud que tienen en las ART son caras. Tenemos casos de trabajadores que se han caído del camión, y cuando llueve es incluso más peligroso.

A esto hay que sumarle que se trata de un trabajo que propone un enorme desgaste físico. El estado atlético es vital para este puesto, ya que el basurero tiene que estar en movimiento todo el tiempo. La mayoría son chicos jóvenes, que pueden correr mucho. Este es un trabajo muy duro, por lo tanto no es para cualquiera.

EM: ¿Que necesitarían de parte del vecino en el cotidiano?

ME: Necesitamos que los vecinos tomen conciencia, y que mejoren cada uno la división de los residuos para el proceso de reciclaje, eso estaría bueno y esperemos que se cumpla. Es por el interés de todos, porque desde el municipio lo que se hace es tratar de organizar la recolección de basura, que es una necesidad conjunta.

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